Ramos Pinto Quinta Bom Retiro 20 year old tawny

Ramos Pinto Quinta Bom Retiro 20 year old tawny Ramos Pinto Quinta Bom Retiro 20 year Old Tawny es un vino generoso de Oporto coupage de variedades autóctonas de la región donde predominan la Touriga Nacional, la Tinta Roriz, la Tinta Barroca, la Touriga Franca y la variedad Tinta Cão, elaborado por la Casa Ramos Pinto en Oporto, Portugal.La Quinta do Bom Retiro es una...
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VINOS INTERNACIONALES

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Ramos Pinto Quinta Bom Retiro 20 year old tawny

Ramos Pinto Quinta Bom Retiro 20 year Old Tawny es un vino generoso de Oporto coupage de variedades autóctonas de la región donde predominan la Touriga Nacional, la Tinta Roriz, la Tinta Barroca, la Touriga Franca y la variedad Tinta Cão, elaborado por la Casa Ramos Pinto en OportoPortugal.

La Quinta do Bom Retiro es una de las más antiguas de la región, está ubicada en Cima Corgo, en el Duero, y está bañada por las aguas del río Torto. La Quinta se compone por 109 hectáreas de viñedos situados en altitudes que van de los 110 a los 400 metros y cuyas edades oscilan de entre los 10 a los 80 años.

Ramos Pinto Quinta Bom Retiro 20 year Old Tawny es una mezcla de lotes de vinos con una edad media de 20 años. Los vinos jóvenes, de un rojo intenso y vivaz, suelen ensamblarse mejor que los vinos a los que la madera, la edad y la experiencia ha transformado, cambiando su color, que ahora se asemeja al de la puesta del sol, y haciéndolos más complejos y difíciles de armonizar. Sólo con el conocimiento se puede conseguir una armonía perfecta y duradera como la que podemos encontrar en este Ramos Pinto Quinta Bom Retiro 20 year Old Tawny un vino generoso que expresa la elegancia del paso del tiempo sin perder su chispa de jovialidad.

Ficha técnica

Uva: 62% Touriga Nacional, 28% Touriga Franca, 10% Tinta roriz

Grado Alcohólico: 20% Vol.

Botella: 75 cl.

Temperatura de servicio: 18 °C

Nota de Cata:

Ramos Pinto Quinta Bom Retiro 20 year Old Tawny es un vino generoso de Oporto. En nariz nos ofrece aromas frutales como el del pomelo, o el albaricoque, así como de frutos secos como la almendra o la avellana, acompañadas por un matiz de cacao y por los aromas propios de su crianza como los de la vainilla, tostados, caramelo o especias. En boca ataca de manera fina expresando su complejidad de sabores donde persisten las frutas acompañadas por notas de nueces maduras y secas. Es un vino elegante y persistente con un final que recuerda al regaliz.